Un gran maratón, una gran carrera. El de más solera en todo el mundo. En esta edición fueron 44.000 corredores, pero es que a otros 56.000 tuvieron que decirles que ya no había plazas. Había representación de 105 países.
La victoria en categoría masculina fue para un americano nacido en Eritrea, Meb Keflezighi, de 34 años, con una marca de 2 horas, 9 minutos y 15 segundos. Al terminar la carrera declaró: “Estados Unidos me ha dado todas las oportunidades aquí en educación, deportes y estilo de vida. Representar a este país es algo muy grande para mí. Las lágrimas que he derramado después de haber ganado son para Shay”. Ryan Shay es un amigo, que murió en 2007, durante la disputa de una carrera.
En mujeres, la victoria la ha conseguido la etíope Derartu Tulú, por delante de la favorita, y plusmarquista mundial, la británica Paula Radcliffe, que entró cuarta, y no pudo conseguir el triunfo por cuarto año consecutivo. De 11 maratones disputados solo ha perdido 3.
El español Jesús Angel García Bragado, mundialista y olímpico en 50 km. marcha, hizo una marca de 2 h. 47:40. Pero realmente lo más destacable de este maratón, es la gran cantidad de corredores populares españoles que se desplazan a Nueva York, para hacer realidad un sueño, correr el maratón de los maratones.