La selección española de balonmano ha vencido a Hungría por 34-25 en el segundo partido del Campeonato de Europa. Si contra la República Checa hablábamos de una victoria arrolladora, ahora se podría definir de espectacular el juego del combinado de Valero Rivera. Se llegó al descanso con un elocuente 17-9, en ningún momento del partido los húngaros tuvieron opción alguna de acercarse a España en el marcador.
La defensa 5-1 española le está dando unos resultados excelentes. En cambio la dura defensa húngara, en este caso, no les sirvió para doblegar al adversario. En el equipo vencedor hay que destacar la primera parte, casi perfecta, de Alberto Entrerríos (al principio de la 2ª fue expulsado), y el gran partido del portero Joseja Humbrados.
Con esta segunda victoria en su grupo, y la derrota por 20-21 de la República Checa ante Francia, España ya está clasificada para la segunda fase del campeonato.
La nota negativa fue la lesión, en el primer partido, del portero hispano-serbio Arpad Sterbik con una rotura fibrilar en el sóleo de la pierna izquierda. El guardameta del Ciudad Real ha comentado: “Estoy triste porque sólo llevaba dos minutos sobre la pista y el Europeo ya se ha terminado. No sé lo que puedo decir ….. Estas lesiones pequeñas son las peores porque es una tontería que dura dos semanas pero que ha llegado en el peor momento, si hubiera ocurrido durante la preparación hubiera podido jugar el Europeo”. En la segunda fase se incorporá a la selección el portero del Pevafersa Valladolid, José Manuel Sierra.